El Gobierno puso en marcha una nueva estrategia cambiaria destinada a contener el precio del dólar oficial en un contexto de creciente presión cambiaria. La medida fue anunciada por el secretario de Finanzas, Pablo Quirno, y consiste en que el Tesoro será ahora el encargado de intervenir en el mercado cambiario mediante la venta de divisas, ante la imposibilidad de que el Banco Central lo haga directamente. El objetivo es mantener la cotización del tipo de cambio oficial por debajo de los $1465, el techo de la banda cambiaria pactada con el Fondo Monetario Internacional, en un momento de alta sensibilidad económica y política.
El cambio en la mecánica de intervención responde a la necesidad del Ejecutivo de evitar que el dólar supere la banda superior establecida, lo que podría generar un