El desfile militar del miércoles en Pekín no fue solo un acto de conmemoración histórica en la Plaza de Tiananmen ; fue, sobre todo, una exhibición calculada de poderío y modernización armamentística . Bajo la atenta mirada del presidente Xi Jinping , acompañado por los líderes de Rusia y Corea del Norte , el Ejército Popular de Liberación (EPL) presentó una serie de sistemas de armas nunca antes vistos en público, marcando un hito en la estrategia de disuasión y en la carrera tecnológica de China.
En su discurso, Xi aseguró que el EPL “ siempre ha sido un ejército heroico en el que el partido y el pueblo pueden confiar ” y llamó a “ acelerar la construcción de un ejército de clase mundial ” capaz de “ salvaguardar resueltamente la soberanía nacional ”. Sus palabras, r