El secretario de Estado de los Estados Unidos, señor Marco Rubio, luego de visitar a la presidenta de México, viene al Ecuador, donde se entrevistará con su presidente. Dada la situación que se vive en el continente y en su propio país, puede deducirse que viene con una agenda para tratar serios problemas, muy específicos. El Ecuador deberá discutirlos y presentar otros de su interés. Eso es lo normal. Pero antes de que empiece esa normalidad, la propia canciller anuncia que a pedido de los Estados Unidos nuestro Gobierno se dispone a recibir en suelo ecuatoriano, anualmente, unos 300 “refugiados”, de varias nacionalidades.
Aquí se impone la pregunta: ¿Son refugiados a los que los Estados Unidos ha recibido con esa calidad? Pues, en ese caso, así debe continuar protegiéndolos. No creo que