El expresidente peruano Pedro Pablo Kuczynski (PPK) enfrenta graves acusaciones por recibir más de 8.6 millones de dólares de la constructora brasileña Odebrecht y del proyecto Camisea. Estos pagos, según un auto de enjuiciamiento del Séptimo Juzgado de Investigación Preparatoria Nacional, están relacionados con actos ilícitos. El juez Jorge Luis Chavez Tamariz ha ordenado el inicio del juicio oral contra el exmandatario.

Los fondos provienen de varios proyectos, incluyendo Trasvase Olmos, IIRSA Sur y Vías Nuevas de Lima, todos gestionados por Odebrecht, así como del consorcio del proyecto Camisea. La acusación sostiene que el dinero fue utilizado para la adquisición de inmuebles, la realización de campañas políticas y diversas transferencias.

El Ministerio Público ha imputado a PPK el presunto delito de lavado de activos, solicitando una pena de 35 años de prisión y una reparación civil que supera los 46 millones de dólares. Además, se menciona que para llevar a cabo el lavado de estos fondos, se habrían utilizado empresas vinculadas a PPK y su socio, Gerardo Sepúlveda Quezada, como Westfield Capital Limited y First Capital Inversiones.

El documento de casi 2,500 páginas revela que la organización criminal que supuestamente lideró PPK comenzó a operar en 2001, cuando fue nombrado ministro de Economía y Finanzas durante el gobierno de Alejandro Toledo. Se indica que PPK habría convocado a Sepúlveda para evitar ser identificado como el autor de las controvertidas "asesorías financieras".