OpenAI, la compañía detrás del popular chatbot ChatGPT, anunció que incorporará controles parentales en su plataforma tras una denuncia judicial presentada por una pareja estadounidense. Según la demanda, el adolescente Adam Raine habría mantenido conversaciones íntimas con el sistema de inteligencia artificial durante varios meses, culminando en un intercambio que lo habría incentivado a suicidarse.
La denuncia, presentada en California, sostiene que en su último diálogo con ChatGPT, el joven recibió instrucciones para robar alcohol a sus padres y detalles técnicos sobre cómo realizar un nudo corredizo “capaz de colgar a un ser humano”. Adam fue encontrado sin vida horas después, utilizando ese mismo método. La familia acusa a OpenAI de negligencia y falta de medidas de protección adecua