Lo que prometía ser una de las etapas más espectaculares de la Vuelta a España 2025 terminó en caos y sin ganador. La organización decidió tomar los tiempos oficiales a tres kilómetros de la meta y cancelar el cierre de la etapa 11 en la Gran Vía de Bilbao, debido a una protesta que puso en riesgo la seguridad del pelotón.

La jornada arrancó desde el imponente Nuevo San Mamés y recorrió 157 kilómetros de media montaña, con siete puertos exigentes. Los primeros intentos de fuga fueron protagonizados por Mads Pedersen, Joel Nicolau, Jordan Labrosse y Gal Glivar, pero no fue hasta el kilómetro 40 que se consolidó una escapada con Marc Soler, Orluis Aular y Pedersen.

El momento más emocionante llegó cuando Mikel Landa se lanzó en solitario tras el puerto de Morga, seguido por el colombia

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