El ingeniero que a los 22 años capturó mercurio en La Oroya y hoy convierte plástico en gasolina

A los 22 años, cuando la fundición de La Oroya era uno de los símbolos de contaminación en el país, un joven ingeniero diseñó un sistema capaz de atrapar el mercurio que se volatilizaba en los hornos. Ese hallazgo temprano marcó el inicio de la carrera de Brecio Daniel Lazo Baltazar , hoy doctor en ingeniería, inventor incansable y creador de una máquina que convierte los residuos plásticos en gasolina.

“Lo que antes salió del petróleo, se puede regresar a su estado original”, resume el investigador, convencido de que la ingeniería inversa es clave para enfrentar uno de los mayores problemas ambientales de la actualidad: la acumulación de plásticos que no se degradan.

Del laboratorio a l

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