La quita indiscriminada y arbitraria de pensiones por discapacidad continúa reflejando historias de salteños que, a pesar de su condición certificada por médicos, hoy no cuentan con el único sustento que les permite sobrevivir.
Analía Méndez es una damnificada de Orán, quien comentó que, a los 6 meses, en los años 80, tuvo meningitis lo cual le dejó secuelas como convulsiones y la parálisis de la parte derecha de su cuerpo , por lo que necesita de acompañamiento permanente.
“Me dejaron de pagar el mes pasado sin ninguna notificación” comentó a El Once TV , quien dijo que al cobrar se dio con la sorpresa que el comprobante mostraba cero a pesar de haber presentado su certificado médico y los papeles a principio de año.
“Vivo de eso solamente y tengo mis hijos que son preadoles