La Fuerza Pública en Colombia está conformada por las Fuerzas Militares -Ejército, Armada, Fuerza Aeroespacial- y la Policía Nacional. Aunque distintas en sus funciones y estructuras, estas instituciones comparten un propósito indeclinable: garantizar la seguridad nacional, salvaguardar los poderes constituidos, mantener el orden público interno y defender la integridad del Estado.
En el imaginario colectivo, la figura del soldado se eleva como símbolo de soberanía, disciplina y sacrificio. El uniforme que porta no solo lo identifica en el campo de batalla, también lo convierte en representante de un compromiso silencioso: proteger a la patria incluso a costa de su propia vida. Desconocer esa grandeza o subestimar su papel en el sostenimiento de la democracia no es un simple error, es una