En el mundo de la biomedicina , los descubrimientos que marcan un antes y un después suelen surgir cuando la ciencia se atreve a mirar un problema desde un ángulo inesperado.
Eso es lo que ocurrió en la Argentina, donde un equipo de la Universidad Austral y el Conicet demostró, por primera vez a nivel mundial, que bloquear la actividad de una proteína llamada RAC1 puede proteger el hígado y reducir de manera significativa el daño que provoca la hepatitis fulminante . El hallazgo no solo abre una nueva ruta terapéutica para una enfermedad con muy pocas opciones, sino que además tiene la particularidad de basarse en una molécula que originalmente se diseñó para la oncología .
La hepatitis fulminante , también conocida como falla hepática aguda grave, es un cuadro crític