Un equipo de ingenieros de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) ha presentado una tecnología que promete transformar la vida de personas con parálisis y trastornos motores. Se trata de una interfaz cerebro-computadora (BCI, por sus siglas en inglés) no invasiva que, apoyada en inteligencia artificial (IA), permite controlar un brazo robótico o un cursor en una computadora únicamente con el pensamiento.
La investigación, publicada en la revista Nature Machine Intelligence , plantea una alternativa frente a proyectos como los de Neuralink , de Elon Musk ,0 que requieren implantar un chip directamente en el cerebro. A diferencia de esos métodos invasivos, el sistema desarrollado en UCLA funciona con un gorro de electrodos y sin necesidad de neurocirugía.
El sistema