El absentismo laboral en Canarias ha alcanzado niveles sin precedentes en los últimos cuatro años, convirtiéndose en un problema estructural que erosiona la productividad, debilita la competitividad y pone en riesgo la sostenibilidad del sistema económico y social.
Según los datos de la Asociación de Mutuas de Accidentes de Trabajo (AMAT) (Anexo I), los procesos de incapacidad temporal por contingencias comunes en Canarias se duplicaron entre 2020 y 2024, pasando de 109.258 a 228.980 (+109,6%), frente al 82,9% registrado en el conjunto de España, según informa la CEOE de Tenerife.
En la provincia de Santa Cruz de Tenerife, el incremento fue aún mayor: +115,3% en apenas cuatro años.
La duración media de las bajas confirma la brecha: en 2024, en Santa Cruz de Tenerife alcanzaron los