El Secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, informó este jueves sobre una nueva política de restricciones de visas impulsada por el Departamento de Estado, dirigida a ciudadanos centroamericanos que colaboren activamente con el gobierno de China y representen una amenaza para la estabilidad regional.

“El compromiso de Estados Unidos es claro: contrarrestar la influencia corrupta de China en Centroamérica”, señaló Rubio en un comunicado difundido en sus redes sociales.

La medida también afectará a los familiares directos de las personas señaladas.

Según el anuncio, la política está enfocada en quienes actúen “intencionalmente en nombre del Partido Comunista Chino” y contribuyan a ampliar su presencia o control en la región.

La administración estadounidense no especificó cuántas

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