La comunidad científica y médica de Estados Unidos, así como los estados progresistas lo tienen cada vez más claro: el secretario de Salud de Estados Unidos, Robert F. Kennedy -nombrado por el presidente Donald Trump- es la mayor amenaza para la salud de toda la población.
“Es el zorro en el gallinero”, como denuncian los expertos en salud, escandalizados por sus purgas en los Centros para el Control de Enfermedades de EU (CDC, en inglés), que están vaciando de veteranos especialistas la institución para poner en su lugar a gente de su confianza, igual de negacionista de las vacunas que él.
Después de meses aguantando cómo el gobierno de Trump y los gobiernos estatales republicanos han ido desmantelando sus sistemas de salud estatales y locales, alentados por Kennedy, el Senado de EU pid