Autoridades estadounidenses anunciaron el decomiso de más de 300,000 kilogramos de precursores químicos provenientes de China, que aseguran que estaban destinados a laboratorios clandestinos controlados por el Cártel de Sinaloa (CDS), sin especificar de qué lado de la frontera se encuentran dichos centros de producción. El decomiso se realizó en altamar, antes de que la carga fuera trasladada al Puerto de Houston, Texas, a más de 1,800 kilómetros de Sinaloa y más de 500 kilómetros de Laredo, uno de los puntos fronterizos más cercanos.
El embajador Ronald Johnson, a través de un mensaje publicado en sus redes sociales la noche de este jueves 4 de septiembre, calificó el decomiso como “histórico” y aseguró que lo asegurado era una cantidad suficiente para producir drogas valuadas en $569 m