Messi vivió una noche muy especial en el Monumental en su último partido oficial con la Selección Argentina en el país. Leo se emocionó en la entrada en calor, entró a la cancha con sus hijos, luego marcó un doblete para la victoria 3 a 0 a Venezuela y se fue, como varias veces en el partido, ovacionado por todos los argentinos.

Leo se movió en la entrada en calor con los ojos vidriosos mientras sentía todo el cariño del Monumental. De hecho, algunos compañeros y el preparador físico lo ayudaron a volver a concentrarse en la preparación del partido. Partido en el que como de costumbre sería figura.

Con gambetas, pases y goles, Messi redondeó un partido completo siendo clave en los tres tantos: marcó dos y dio un pase que fue fundamental para el otro. Leo abrió el marcador a los 39 min

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