La viceprimera ministra británica, la laborista Angela Rayner , ha presentado este viernes su dimisión tras conocerse que no pagó suficientes impuestos cuando compró un piso en la localidad costera de Hove, en el sur de Inglaterra. Rayner, referencia de la izquierda laborista, se ha visto forzada a renunciar después de que fuera investigada por Laurie Magnus, encargado de supervisar el comportamiento ético de los ministros.
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