La imagen de Carlo Acutis, el beato conocido como ‘el influencer de Dios’, fallecido en 2006 con solo 15 años, y que este domingo se convertirá en el primer santo milenial de la historia, «ilumina» desde hace meses la basílica de la Mercè.
Su mochila a la espalda, su cabello negro, su distintiva camiseta roja y su móvil, siempre cerca, como cualquier adolescente de su generación, llaman la atención de los fieles de la basílica de la capital catalana, conozcan o no su historia particular y su vínculo con Barcelona.
La imagen de Acutis, de algo más de 50 centímetros, llegó a la basílica de la mano del padre Fermín y de Mónica Padrol, miembro del consejo de pastoral y Economía de la Mare de Déu de la Mercè de Barcelona, quienes la encontraron en un puesto de santos durante una peregrinación