Las autoridades de inmigración de Estados Unidos han detenido a cientos de trabajadores, la mayoría de ellos ciudadanos surcoreanos, en unas instalaciones de Hyundai Motor en Georgia como parte de una investigación sobre prácticas laborales ilegales.
En concreto, la medida afecta a 475 personas, según ha informado ‘NBC’ y ha paralizado la construcción de una fábrica cercana de Hyundai en conjunto con LG Energy Solution que fabricará baterías para vehículos eléctricos.
La orden de registro ha sido ejecutada por agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos y forma parte de una investigación criminal en curso sobre denuncias de prácticas ilegales de empleo y otros delitos federales graves, según informó ‘Associated Press’, citando un comunicado del Departamento