La historia de España no puede entenderse sin la presencia del pueblo gitano. Llegaron a la península a comienzos del siglo XV y, pese a sufrir siglos de persecución y marginación, han dejado una huella cultural profunda en la música, la literatura y, también, en la lengua. De ese contacto entre los gitanos y la población mayoritaria surgió el caló , un idioma propio, nacido en España y que hoy está en peligro de extinción.
No se trata del andaluz ni de una variante del español, sino de un habla mestiza que combina la estructura gramatical del castellano con un rico vocabulario procedente del romanó, la lengua original de los gitanos europeos. Durante siglos fue un vehículo de identidad y un código de comunicación dentro de la comunidad gitana. Hoy, sin embargo, sobrevive en uso cot