Una grave falla en la confección de pasaportes argentinos obligó a miles de ciudadanos a devolver sus documentos recién emitidos en distintos consulados. El Registro Nacional de las Personas (Renaper) confirmó el problema y lo atribuyó a la tinta de seguridad provista por una firma alemana, utilizada en las impresoras oficiales desde hace más de una década.

Según un pedido de informes del diputado Esteban Paulón al director del Renaper, Pablo Luis Santos, serían al menos 60.000 los pasaportes defectuosos, aunque fuentes extraoficiales estiman que la cifra podría superar los 200.000. La situación genera serias complicaciones para quienes deben viajar por turismo, trabajo o emergencias y se quedaron sin documento válido.

El error está vinculado a una tinta negra de seguridad que, aunque in

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