Este año se cumplen 25 añadas de un vino tinto, criado en roble, que nació como una perla suelta en el mapa del vino regional. Durante todo este tiempo ha envejecido en la nave de crianza anexa al taller del cocinero Jesús Ramiro. A apenas veinte metros de la orilla del Pisuerga un río que, curiosamente, unos kilómetros más abajo desemboca en el Duero, aumentando el caudal y la merecida fama de este río de vinos.
La faceta del bodeguero vallisoletano universal es suficientemente conocida en los foros de gastronomía y vinos dentro y fuera de España. Y es que el Duero como referencia del vino español ha marcado siempre sus intervenciones en congresos, foros y jornadas gastronómicas. A mediados de los ochenta fue el primer hostelero que se adelantó al tratamiento del vino de calidad en sus c