Este sábado 6 de septiembre se conmemora el Día Internacional del Buitre, una ocasión para reconocer el valor de estas aves carroñeras que, aunque incomprendidas por muchos, cumplen una función esencial en la naturaleza. Su presencia garantiza la limpieza de los campos, evita la propagación de enfermedades y mantiene el equilibrio ecológico.
A lo largo de la historia, los buitres han despertado fascinación y temor. En algunas culturas, como la celtíbera, se les atribuía un papel espiritual: se creía que alzaban las almas de los guerreros caídos hacia el cielo. Hoy, más allá de los mitos, su labor como sanitarios del medio ambiente es incuestionable.
Una crisis que dejó huella
Entre 1992 y 2007, las poblaciones de tres especies de buitres asiáticos se desplomaron más del 95%. Este colaps