El recorrido de “El conjuro” como saga de terror ha sido un fenómeno singular en la industria del cine. No solo logró mantenerse durante más de una década, sino que también se consolidó como una marca reconocida incluso por quienes no siguen el género de cerca. Su supuesta despedida llega con “El conjuro 4: Los últimos ritos”, la cuarta entrega dirigida por Michael Chaves, que se presenta como el cierre de la historia de los Warren.
Desde el principio, la historia se alimentó de los expedientes atribuidos a Ed y Lorraine, una pareja que dedicó su vida a documentar presuntos encuentros con lo paranormal.Su archivo fue un material de oro para Hollywood, aunque por supuesto, la fidelidad histórica nunca fue lo prioritario. Lo esencial era dar forma a un espectáculo con identidad propia. Con