"Basta, dejenme en paz, me están acosando, voy a llamar a la policía... Y los voy a filmar". La diputada oficialista Lilia Lemoine gritaba en plena calle a un grupo de periodistas que la seguían, le preguntaban por las coimas, Karina Milei, y ella roja de furia trataba de filmarlos, hasta que en un momento intentó tomar una especia de selfie con ese presunto acoso, y algunos de los hombres de prensa se reían preguntando si estaban bien ahí o debían acomodarse para salir en la foto...
Todo eso en apenas unos minutos, en Vicente López, cerca del colegio en el que había votado Karina Milei. Y si a alguien se le ocurrió, como al "Jefe" la perseguían numerosos periodistas cuando salió de votar, que sería una buena idea mandar a Lilia al lugar "para llevarse las marcas", la movida resultó un