Tras un verano de olas de calor de récord y los estudios que pronostican que a futuro el calor extremo seguirá aumentando en España, con especial incidencia en la cuenca mediterránea, las medidas a tomar para la protección de las personas y la adaptación de las ciudades no deben retrasarse. Y Granada, a día de hoy, no está bien preparada. Es lo que dice el último informe de Greenpeace sobre refugios climáticos, que sitúa a la ciudad en la lista de capitales sin estos recursos, que se consideran esenciales para proteger a los ciudadanos frente al calor extremo y reducir las consecuencias de las altas temperaturas.
De hecho, la falta de refugios climáticos ha sido protagonista en Granada desde la primavera cuando La Calle Mata inició una campaña reivindicativa de estos recursos para las per