El comienzo de septiembre da paso a una nueva fase en el devenir anual de la economía vasca . Llega el tramo final de 2025 con riesgos que vienen de atrás -menores exportaciones, parón en Europa, costes energéticos, necesidad de talento- y otros de los que, tras discutirse mucho, se plasman en una realidad concreta, como son los aranceles impuestos por Estados Unidos a la UE.
El punto de partida, pese a todo, no es malo. El PIB de Euskadi ascendió durante el segundo trimestre del año 2025 un 2,2% con respecto al mismo trimestre del año anterior, según las estimaciones del Eustat. Con respecto al primer trimestre del año, el incremento del PIB sí fue algo más débil, del 0,5%. En cualquier caso, la línea seguida por la economía en el primer semestre del año es la prevista, con un te