Cada 40 segundos en el mundo se registra una muerte asociada al suicidio. El dato es alarmante y una invitación a entender la salud mental como parte del derecho a la vida, puesta en el centro de atención.
El Día Mundial para la Prevención del Suicidio, conmemorado cada 10 de septiembre desde hace 22 años, representa un momento para encontrar en las estadísticas aliciente al diseño de políticas públicas. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, cada año se suicidan alrededor de 700 mil personas; es la cuarta causa de muerte entre jóvenes de 15 a 29 años. Países como Lesoto, Guyana y Lituania registran las tasas más altas, con más de 20 muertes por cada 100 mil habitantes, mientras México se mantiene con alrededor de 6 por cada 100 mil.
La Ciudad de México, con una tasa de 3.4