El arte de Banksy ha vuelto a sacudir el corazón de Londres. En la fachada del histórico Tribunal Superior de Justicia, el enigmático artista británico dejó este lunes una escena tan cruda como simbólica: un juez con toga y peluca levanta el mazo para golpear a un manifestante caído en el suelo, que aún sostiene una pancarta manchada de rojo. La obra, rápidamente viralizada en redes sociales, fue reivindicada por el propio Banksy en Instagram con su localización: «Royal Courts of Justice. London».
El mural no tardó en generar controversia. A primera hora ya estaba cubierto por plásticos negros y protegido por barreras metálicas y agentes de seguridad. Las autoridades justificaron la medida por la antigüedad del edificio victoriano, con 143 años de historia y considerado patrimonio protegi