Barcelona El movimiento de Puigdemont en el TC no solo ha desconcertado a los miembros del alto tribunal, sino también a varios dirigentes de Junts, que no acaban de ver la virtud de retrasar la decisión sobre el recurso de amparo de la amnistía. Sin embargo, en medio del desconcierto hay fuentes que dan dos posibles explicaciones.

La primera es que el abogado Gonzalo Boye no se fía de lo que puedan decidir a última hora los miembros del TC y quiere plantear las recusaciones a los tres magistrados conservadores por si, eventualmente, debe acabar en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos alegando falta de imparcialidad del plenario.

Y la segunda es que este martes también el TC debía rechazar las medidas cautelarísimas solicitadas por el expresidente, es decir, debía denegar la retirada

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