Las pequeñas y medianas empresas en el país constituyen la columna vertebral del aparato productivo colombiano, pues representan el 99,5% del tejido empresarial y generan cerca del 65% del empleo nacional.
Sin embargo, su alta tasa de mortalidad sigue siendo una alerta roja. Según cifras actualizadas de Confecámaras, solo el 30% de las pymes logra sobrevivir más allá de los primeros cinco años, lo que evidencia la fragilidad de su gestión administrativa.
Para Marcela Garzón Posada, directora del programa virtual de Administración de Empresas de Areandina, este fenómeno no se explica solo por factores macroeconómicos.
“La administración de una compañía, no solo requiere intuición o experiencia, también necesita estructura, planificación y herramientas que le permitan a sus lídere