Los MTV Video Music Awards, por nostálgicos que parezcan a veces, siguen siendo una plataforma para cimentar a las estrellas del mañana, aunque hoy en día los videos musicales se vean mucho más por internet que por televisión. Su naturaleza de plataforma para talentos emergentes hace de los VMA un lugar confiable para las caras nuevas y para los tipos de riesgos de moda divertidos y extravagantes que la gente joven y mayor podría evitar en galas de premios más tradicionales.
Algunas de esas manifestaciones en la alfombra roja de la 41.ª edición de los VMA, celebrada el domingo, fueron boas y sombreros de plumas en tonos pastel, tazas de café deslumbrantes y un Labubu vestido como la estatuilla de la Persona Lunar que se entrega a los ganadores de los VMA. En la ceremonia de este año, fuer