Conductores que circulan con frecuencia por el túnel ubicado en la salida de Villamaría hacia Manizales manifestaron su inquietud por una piedra de gran tamaño. La roca quedó expuesta tras un derrumbe ocurrido hace algunos meses, luego de intensas lluvias.
Según relatan los usuarios de la vía, el material desprendido de la montaña no ha sido atendido de manera definitiva, y la piedra permanece en un punto visible que podría desestabilizarse en cualquier momento. El temor principal es que, de caer, provoque un accidente de consideración en un corredor por el que a diario transitan cientos de vehículos, incluidos buses de transporte público y de servicio intermunicipal.
Los ciudadanos piden a las autoridades una revisión técnica y un monitoreo constante de la zona , con el fin de evitar