La NASA reveló este miércoles un hallazgo que podría marcar un antes y un después en la exploración espacial: un tipo de minerales en una roca marciana que, según los científicos, constituyen la evidencia más convincente hasta ahora de la posible existencia de vida en el planeta rojo.
El descubrimiento fue realizado por el rover Perseverance en el cráter Jezero, un antiguo lago y delta fluvial donde se cree que, hace miles de millones de años, existieron condiciones habitables. El espécimen analizado, conocido como Cheyava Falls, es un bloque de mudstone con diminutas manchas oscuras y estructuras circulares que llamaron la atención de los investigadores.
Joel Hurowitz, geocientífico de la Universidad de Stony Brook y miembro del equipo de Perseverance, señaló que este es el indicio más