Un delincuente en Venezuela es un «malandro», y si roba dinero entre una multitud, cualquiera dirá que a alguien le han quitado sus «churupos» en medio de un «bululú». Estas y otras palabras las ha recopilado Ronald Kanzler en Venezolario, un juego con más de cuatro millones de descargas que, según dijo, une a las familias separadas por la migración.
«Ha funcionado para unir a las familias que están, por causas que ya sabemos, separadas», dijo Kanzler, graduado en Artes y programador venezolano de 37 años.
Venezolario salió a la luz en julio pasado y consiste en adivinar, a través de pistas, palabras de distintas regiones de Venezuela, lo que para Kanzler ha permitido que se comparta el vocabulario de varias generaciones.
«Se está convirtiendo en algo más que un juego, en un fenómeno so