Los puestos de reparación de teléfonos atraviesan una fuerte caída en la demanda de servicios. Según técnicos del sector ubicados en el centro de Maturín, las reparaciones han disminuido hasta en un 50%, debido a que muchas personas optan por adquirir nuevos dispositivos a través de aplicaciones, que ofrecen facilidades de pago y entrega inmediata.

‎Marcos Flores, técnico, explicó que la situación se ha vuelto cuesta arriba.

‎“Las ventas han bajado un 50%, lo que pasa es que mientras el dólar va subiendo, la gente se va quejando y los repuestos que nosotros compramos cada día están más caros. Aunque se consiguen, los precios aumentan constantemente y los clientes no quieren pagar”, señaló.

‎Flores detalló, que las reparaciones más comunes siguen siendo las de pantallas, pines de carga y

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