La Orinoquía colombiana se ha consolidado como una región de gran importancia turística por su vasta riqueza natural, cultural y de biodiversidad. Su geografía es dominada por extensas sabanas, ríos caudalosos y cielos infinitos, que ofrece un escenario ideal para que los viajeros puedan realizar actividades como ecoturismo, avistamiento de fauna silvestre y apreciar lindos atardeceres y amaneceres.
Además, esta zona del país guarda una rica tradición cultural que se expresa en la música del joropo, la danza, la poesía y una gastronomía auténtica. Precisamente este último aspecto es clave para disfrutar aún más de la experiencia en este territorio.
Los platos típicos están muy ligados a su cultura ganadera y al uso de ingredientes locales como la yuca, el plátano, el maíz y las carnes