Lizeta abordó la nave de su IV periodo de gobierno, con certeza que llegará a puerto seguro. Siempre dicen que no alcanzará los cuatro años y siempre lo logra, por ende, está convencida de que así será.
Lo hizo con magnificencia, en un bonito y singular acto al aire libre en el área de estacionamiento de la cinemateca África Oraá, espacio estrenado a tal fin; en eso innovó.
Bajo un toldo gigante en el marco de mucha elegancia, prestó juramento. Hubo una rigurosa seguridad al pensar que vendría Diosdado Cabello a juramentarla; al saber que no estaría, cedió la presión, dando paso a la espontaneidad y libertad de los deltanos.
Fue el suyo un discurso incluyente donde hubo para todos, pretendiendo de aquí en adelante, en el que muchos suponen será su ultimo periodo de gobierno, abrir el ab