Más de 500 funcionarios de la ONU se rebelaron contra el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos (ACNUDH), Volker Türk, al acusarlo de negarse desde el inicio de la agresión israelí en Gaza a usar el término "genocidio" para reconocer públicamente los crímenes que comete el sionismo, pese a la advertencia de la Corte Internacional de Justicia (CIJ).
Los trabajadores enviaron una carta enérgica exigiendo que la Oficina utilizara la palabra "genocidio" en sus declaraciones. Según señalaron, la omisión de Türk diluye la responsabilidad legal de "Israel" y mina la credibilidad del organismo como garante del derecho internacional.
El Comité del Personal de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Comité del Personal del ACNUDH), de conform