Tras la explosión de una pipa de gas en el Puente de la Concordia, en Iztapalapa, el pasado 10 de septiembre, la escena de emergencia se trasladó de inmediato a los hospitales de la capital, donde decenas de personas heridas fueron ingresadas con quemaduras y lesiones de gravedad.

En medio de la tensión, la solidaridad ciudadana emergió como el principal sostén de familiares y pacientes en el Hospital General Rubén Leñero y otros centros de salud donde fueron atendidos los afectados.

De acuerdo con reportes oficiales, más de 50 personas resultaron lesionadas, varias de ellas con quemaduras de segundo y tercer grado, mientras que la cifra de fallecidos se mantiene entre cuatro y ocho, dependiendo de las fuentes. En el caso del Leñero, ubicado en la alcaldía Miguel Hidalgo, recibió a una p

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