E n Colombia, el deporte de resistencia se mezcla con la panela, el bocadillo veleño y las papas cocidas que caben en el bolsillo de un ciclista. Y aunque la industria del fitness está llena de suplementos importados y productos en empaques brillantes, la nutrición criolla sigue demostrando que tiene con qué competir.
De esto sabe bastante Vanessa Cubides, médica de 31 años nacida en Roldanillo (Valle del Cauca) y hoy radicada en Medellín. Tras haber vivido la pandemia en las unidades de cuidado intensivo y superar un trastorno ansioso-depresivo, encontró en el deporte y la nutrición su propósito de vida. Formada con una maestría en nutrición y entrenamiento deportivo en la Universidad Europea y la Escuela del Real Madrid, combina su conocimiento científico con el amor por la comida