El silencio de la casa, antes llena de música y risas, ahora pesa demasiado. Maribel Guardia, en una emotiva entrevista en ‘Venga la Alegría’ , reveló su decisión de mudarse. “Es hora de un nuevo capítulo” , confesó con la voz entrecortada, dejando ver la profunda tristeza que aún la acompaña tras la partida de su hijo Julián Figueroa.

La casa, testigo de momentos inolvidables, se ha convertido en un santuario de recuerdos agridulces. Entre ellos:

La serenata improvisada de Julián bajo el viejo roble del jardín, melodías que aún resuenan en el viento.

Los ponys que el querido Vicente Fernández regaló a su nieto, símbolo de un legado familiar lleno de música y amor.

La foto de Maribel y Julián frente a la Virgen de Guadalupe, un testimonio de la fe que los unió y continúa guiándola.

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