En el patio de la Abadía de Sacromonte y bajo el cielo abierto, el legendario guitarrista almeriense Tomatito desplegó todo su arte en el marco de la Bienal de Flamenco de Granada. Rodeado de un grupo de músicos excepcionales que contribuyeron a hacer la velada inolvidable, su hijo José del Tomate como segunda guitarra, los cantaores Morenito de Íllora, Kiki Cortiñas, y Joni Cortés en la percusión, todos ellos acompañaron cada nota y cada compás con maestría.

Tomatito se encontraba de un humor excelente: sonreía constantemente y bromeaba con el público. Tras un arranque intenso y cargado de emoción, con un toque inicial que atrapó desde la primera nota, el maestro tomó la palabra para dirigirse al público con gratitud. "Estoy muy feliz de volver a Granada, esta ciudad es una maravill

See Full Page