En pleno corazón del Campo de Calatrava, Calzada de Calatrava se convirtió en la cuna de un invento que marcó a varias generaciones: el pegamento Imedio. Su creador, Gregorio Imedio Caballero , nació en este municipio ciudadrealeño en 1915 y, desde muy joven, comenzó a experimentar con fórmulas químicas hasta dar con una mezcla capaz de reparar las cintas de celuloide que se rompían en los cines de verano. Aquella solución artesanal sería el germen de uno de los adhesivos más conocidos del país.

Tras la Guerra Civil, en 1944, Gregorio Imedio puso en marcha la empresa Productos Imedio , que pronto pasó de ser un pequeño taller local a una industria de alcance nacional.

En sus primeros años, gracias a la máquina envasadora que él mismo diseñó, la producción alcanzaba los 500 a 1.000

See Full Page