El aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas vive este domingo una jornada complicada por las largas colas en los controles de seguridad, a raíz de la huelga convocada por parte de la plantilla de Trablisa, empresa encargada del servicio. La protesta está ralentizando el paso de viajeros y obligando a Aena a recomendar a los pasajeros acudir con más margen antes de embarcar.
La novedad del conflicto llegó en las últimas horas después de que la propia Trablisa reclamara que la huelga sea declarada “ilegal y abusiva”, al considerar que ha sido convocada por un grupo “muy minoritario” de empleados. En un comunicado, la compañía señaló que ha solicitado al Instituto Regional de Mediación y Arbitraje de la Comunidad de Madrid que emita una resolución en este sentido.
Trablisa cuestiona la legit