El ser humano lleva varios miles de años tatuándose . El primer registro que se tiene de tinta en la piel es en Ötzi, el Hombre de Hielo, la momia más famosa de Europa, que fue descubierta en los Alpes en 1991. Los historiadores concuerdan que era un hombre que vivía en el Tirol, hace unos 5200 años, en una región montañosa que limita entre lo que hoy conocemos como Italia y Suiza.

Desde entonces, han pasado milenios donde los tatuajes se han ido popularizando y dejando una marca para siempre en el cuerpo. Se cree que Ötzi se había realizado algunos de ellos en zonas donde el envejecimiento va provocando dolor, como las rodillas y los tobillos, lo que hace creer a arqueólogos, según revistas especializadas, que se los realizó para algún tratamiento de salud . Desde allí hasta

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