El Kinépolis fue el complejo cinematográfico más grande del mundo en el momento de su apertura, en 1998. Situado en Pozuelo de Alarcón, en la Comunidad de Madrid, albergaba el mayor número de butacas de la historia, y no había niño en la capital que no pidiese a sus padres ir a ver una película en esa enorme pantalla. Incluso se acudía desde otras ciudades de España porque ir al cine era un evento familiar. Cinco años más tarde, en 2001, se estrenó la primera de Fast & Furious, la saga a todo gas que mezcla coches tuneados y carreras ilegales a base de reguetón, hip hop y electrónica. Ahora, en las inmediaciones de ese cine, los eventos son otros, y esa ficción se ha hecho realidad.
Algunos vecinos de la zona están hartos de despertarse de madrugada a base de frenadas y acelerones. Ya van