Los cubanitos son un clásico de la infancia y siguen siendo el acompañamiento perfecto para un helado, un café o simplemente para darse un gusto dulce en cualquier momento del día. Su textura crocante y su sabor delicado los hacen irresistibles, pero muchas veces creemos que son difíciles de preparar y terminamos comprándolos ya hechos. La realidad es que, con pocos pasos y solo cuatro ingredientes, podés prepararlos caseros y disfrutar de una versión más fresca y saludable.

Lo mejor de esta receta es que no requiere de experiencia en repostería ni de utensilios especiales. También lo podés compartir con quienes no puedan consumir harinas porque son sin gluten. Además, como son caseros, podés personalizarlos: rellenarlos con dulce de leche, crema, helado o simplemente comerlos solos. Un

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