Cuando las hojas caen y el aire baja, uno de los pequeños placeres del día es acurrucarse con una bebida caliente. La taza FÄRGKLAR de IKEA , tono lila, ha llegado justo para eso: aportar un toque de color suave, acogedor, que acompaña tanto los momentos íntimos como los encuentros informales. Está diseñada para uso diario: el tamaño es generoso (14 onzas, aproximadamente 415 ml) lo que permite que café, té, chocolate caliente o infusiones duren más sin necesitar recarga frecuente.

El cerámico con vidriado reactivo le da un acabado rústico-artesanal, cada pieza con pequeñas variaciones de tono que la hacen única. Ese toque imperfecto es lo que la diferencia de tazas más industriales, y lo convierte en objeto decorativo cuando está vacía, sobre la mesa, estantería o barra de cocina.

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