Señor director:
Por lo menos que desde hace un siglo, los argentinos, en particular los sanjuaninos, aprendimos a no cuidar todo aquello que sea estatal. Estamos en otro siglo, son tiempos de cambios, desde lo tecnológico, educativo, político y social. Por lo tanto, aunque en general nos cuesten aceptar cambios, debemos hacerlo, sabiendo que es por el bien común. Me refiero en especial al cuidado de todo lo público, desde los edificios, el trato y el respeto que se debe ofrecer como servidor público a los ciudadanos. Ser custodios de todos los bienes del Estado para que se mantengan en el tiempo y no ser descuidado como si fuera “Tierra de nadie”. El erario público, debe ser muy bien administrado y cumplir con su finalidad: el bien común.
Beatriz del Alba
Ver los comentarios ›